Los tiempos de la siembra y la cosecha son relativos y nunca constantes, pues cambian a lo largo del año, y dependen de las verduras que se plantarán. Cada producto tiene su ciclo. A su vez, la calidad de este dependerá de la calidad del entorno, la tierra, la lluvia, el suelo y otras decenas de factores.
Un equipo de esta índole puede ofrecer potenciales programas que contribuyan a manejar los tiempos de siembra y cosecha. Además del calendario y la agenda, en la cual se pueden marcar días especiales de siembra, pueden configurarse recordatorios que establezcan procesos indispensables, como el retiro de malezas, el riego controlado y la utilización de pesticidas.
Por lo demás, estos programas pueden estar conectados a fuentes oficiales de información respecto al tiempo que se avecina. De esta forma, se pueden conocer los días de lluvia, para evitar el sobreriego, o los días de sol, para proteger la siembra de la luz solar constante, como puede suceder con algunos productos.
Los días de cosecha también pueden configurarse según el calendario desde el día de siembra. De esta forma, puede calcularse cuántas unidades del producto se obtendrán realmente, más allá de las proyectadas en un comienzo.
El registro automático de cosechas se puede realizar en un MacBook Pro segunda mano de manera eficiente gracias a los programas de cálculo de unidades. En ocasiones, los granos o productos pueden ser demasiados, por lo que el cálculo de las unidades respecto al volumen puede llevarse a cabo.
Un software de gestión agrícola es realmente útil a este respecto. Además, conociendo con exactitud cuántos granos se tienen o su volumen, pueden definirse las zonas de guardado, los silos pertinentes o el tamaño de las bodegas que se necesitarán.
Además, al conocer el volumen de cosecha, podrán cumplirse los acuerdos con empresas externas que requieren de esos productos, preocupándose del transporte y el servicio de entrega. Un MacBook Pro de segunda mano es una herramienta más que útil para estos propósitos.